domingo, 9 de mayo de 2010

Otro más.

exámenes, ¿cuándo?
suspenso ¿quién?

enjoy antifa music

P.d: Vale, el concierto lo montan los de Otra Forma de Moverte, que apelan por una juventud sin drogas a base de zumos, cariocas y pins, y yo, aunque lo veo correctísimo y me parece genial y necesario (salvo porque son unos institucionalistas de mierda) he calzado en el cartel a un mono con una jeringuilla, fallo mio, no me di cuenta.

Pero uno es precavido, y por ello ya tengo pensado que decir si me vienen a tirar mierda los de OFM, utilizaré un método estudiado y medido con precisión, que me ha sacado ya de muchas situaciones complicadas, a saber:

análisis - adecuación - respuesta - carrera

El primer paso es analizar al interpelador ya que, aunque es complicado y se puede caer fácilmente en el error, los primeros gestos y palabras de una persona pueden servir para tener una idea aproximada de su capacidad intelectiva y para calcular su posible reacción, así pues, una vez se haya analizado a la persona que pretende saber el porqué del mono heroinómano, llega el momento de la adecuación de la respuesta a exponer, veamos:

Interpelador avispado: Es una simple y llana metáfora, ya sabe, las drogas, las malditas drogas, nos degradan, nos arrancan la inteligencia, la razón que nos hace únicos, nos volvemos irracionales, simples... ¡y no sólo eso caballero!, si hubiera querido hacer ver únicamente esta irracionalidad habría puesto un hurón o un conejo, animales, sí, pero nobles, astutos... he puesto un mono, un burdo macaco porque las drogas, oh demenciales drogas, también nos vuelven estúpidos, completamente idiotas, como los monos ¿sabe?, abocados por naturaleza a la ingesta de bananas y al onanismo público, la más degradante de las artes me atrevería a decir, masturbación y plátanos, plátanos y masturbación... una lástima, ¿ha estado usted en Ortigueira o en el Lumbreiras? ¿No? Le parecería una reserva natural de monos, se lo prometo... oh, lo siento, debo marchar, mi partido de polo no va a jugarse solo, un placer amigo ¿puedo llamarle amigo, no? Gracias deberas, ciertamente un placer, tome un Ferrero Roché.

Interpelador limitado: Verá, es que es el Doctor Mono.


Y si la respuesta no es satisfactoria y el enfrentamiento se torna seguro, se señala a un punto alejado al grito de "¡dios santo, un bebé metiéndose un pico!" y cuando el recién conquistado enemigo se gire, aprieto los dientes y corriendo hasta el local, es con diferencia la solución más inteligente, como decía el increible genio Steven Hawking "Corre cabrón, tú que puedes".

No hay comentarios:

Publicar un comentario