jueves, 29 de diciembre de 2011

Querida familia:

En la casa de Lavapies se vive muy bien, se almuerza pan tumaca del recicle, que nunca falta, mientras se escucha reggaeton y se fuma el tabaco de Dani. Para insultar utilizamos palabras como "mamavegga" "petapinga" "pendejo" o "te voy a meted tremenda paliza" y para saludarnos un simple "vístete joder". La verdad es que estoy gozando un mogollón, un montón, botellón de ron tras botellón, en definición: un paraiso ¡tu perro está cagando en el piso! Pero bueno, a veces hay que salirse del closet, quitarse el esmalte, ponerse higper y sacudirse el sudor como si fuera un waiper porque para algo somos rebeldes como un viejito corriendo en calzoncillos con viagra en los bolsillos y volver a casa de mamá y a ensayar. Da igual, según Sigmund Froid la sexualidad rodea todo lo que soy y la casa no es una excepción, sólo hizo falta meter la puntita y moverla un poco para que se abriera. No sé si se coge la metáfora pero el caso es que estoy en el edén, amén.



Queridos Reyes Magos:

Mis neuronas.
Un colchón.



No hay comentarios:

Publicar un comentario